Me encanta cuando a cualquier hora del día saca todo y se pasa ratos y ratos jugando, a su aire, en su mundo, hablando continuamente, contando historias...
Me permite estar en la cocina trabajando, recogiendo ropas, limpiando... ¡cosiendo no, que no me deja! Jugando solo pero sabiendo que estoy cerca para cuando me necesita.
Escuchándolo, mirándolo desde la distancia.
¡Qué bien que hoy empezamos las vacaciones escolares para disfrutar mucho más de todos estos momentos!